Necesita Mejorar

Cuando llegaba el final del curso en el colegio, nos daban las notas y, junto al nombre de todas las asignaturas, había dos siglas: PA, es decir, Progresa Adecuadamente. Yo era un alumno ejemplar, pero me juntaba con algunos bandarras que no conocían esas siglas. Eran otras dos letras las que torturaban a sus padres año tras año: NM, o sea, Necesita Mejorar. En estos tiempos de Educación para la Ciudadanía, el ethernet y las tablets, esos conceptos pasaron a la historia. Es hora de reivindicarlos para referirnos a la selección española de baloncesto.

Hoy se han puesto algunas bases para mover el balón con rapidez en ataque y para cerrar los rebotes cortos. Progresamos adecuadamente en el liderazgo de nuestra rutilante estrella y de su escudero preferido, pero necesitamos mejorar en el cerramiento del rebote largo (pequeños como Ricky, Calderón, Sada y Llull tienen que ponerse las pilas en este apartado) y en el acierto ofensivo de los jugadores de banquillo. Portugal es uno de los enemigos más débiles que cualquiera desearía encontrarse en el camino hacia una medalla. Pero volvió el supuesto festín volvió a atragantarse un poco. Nada, sólo una tos y fuera el hueso de pollo, pero durante unos segundos te quedas sin aire y los comensales empiezan a darte golpecitos en la espalda para evitar la tragedia. Navarro, Rudy y los Gasol propinaron esos golpecitos a los San Eme, Sada, Llull, etcétera, para que no se quedase atorado el pollo portugués.

Esos últimos minutos, en los que los mopa ya empiezan a mirar los mensajes de sus móviles y la gente se va al frigorífico, se notó que los alumnos de segunda fila no dan la talla si el rival mantiene la tensión y se muestra acertado. Hasta Sada nota el encogimiento de muñeca que debería sentir Ricky (no tires más hasta que no cambies la mecánica y lances 200 tiros al día en entrenamiento personal). NM para Llull, porque falla bandejas; NM para los bases en general, que no buscan a Ibaka el poco tiempo que está en pista; NM para San Emeterio, que es una sombra del que juega en Vitoria; y, por supuesto, NM como una casa para Víctor Claver, que no es capaz de meter ni un solo punto ni en los minutos de la basura. Este dato hace, irremisiblemente, que nos acordemos de un tal Carlos Suárez, que debe estar sonriendo en su casa de Madrid...

Mañana Gran Bretaña, un examen óptimo para los estudiantes tardíos que no terminan de concentrarse para superar la reválida de septiembre. Mientras, los empollones Gasol, Navarro y Rudy con la recuperación de Calderón, esperarán su momento para decir la lección de corrido, sin chuletas y dejando boquiabiertos a los profesores.