martes, 15 de mayo de 2007

Debate sobre el Estado de las Canchas


El alcalde de Huelva, Perico Rodri, se jacta de que él fue de los primeros que se vistió de corto y tiró melones a un cesto en la prehistoria de la vieja Onuba, cuando existía el Velódromo. Bueno él y Bobby, claro. Sin embargo, en 12 años al frente del Ayuntamiento de Huelva no ha sido capaz de llenar las canchas municipales de chavales, de vida deportiva en definitiva.


El otro día me peleé (verbalmente) con el encargado de la pista de la barriada del Molino, en la nueva Onuba, porque se negaba a abrirla en domingo. Señores, el Día del Señor es el único en el que mucha gente puede practicar deporte y vamos a recordar que los polideportivos y gimnasios están cerrados. Es un silogismo muy sencillo: si las pistas son p-ú-b-l-i-c-a-s, es decir, pagadas con el dinero del contribuyente, ¿por qué no podemos hacer uso de ellas?


Si hacemos un repaso por los puntos neurálgicos del basket callejero en Huelva, el panorama es desolador: la pista de la barriada del Carmen fue quemada por unos gitanos (y hasta hoy); Los Rosales fue saqueado; los aros de Pérez Cubillas están rotos; las mejores pistas de la ciudad, situadas en el hotel Suárez (una rosquilla para esa mente pensante que debería ser lobotomizada), han servido para albergar una familia de indigentes durante meses y ahora son 'radioactivas'; los institutos están cerrados y los chavales de hoy día ni siquiera hacen el esfuerzo de saltarse una pequeña vallita, porque la Play les llama; si algún colegio está abierto, sale el guarda echándote a patadas (y la Junta tan ancha y pancha, y encima la ministra se queja de la obesidad reinante); para jugar en la Ciudad Deportiva hay que retratarse (eso si hay pista libre); y un emblema como el colegio San Pablo parece la balsa de fosfoyesos, con garrapatas extra; y en Nueva Huelva tienes que pelearte con las madres jóvenes porque llevan a sus niños a pasear por la línea de tres puntos y a echar una meadita en la zona.


Con ese horizonte, es un milagro que todavía haya gente interesada en hacer deporte en nuestra ciudad y que el Ciudad vaya a ascender a la ACB, así que, Perico Rodri, si vuelves a salir elegido, por el amor de Dios, rehabilita y cuida las canchas públicas, pon monitores que no sean perros de presa (que ayuden a jugar, que no sean diablos que te invitan a irte al bar más cercano en pantalón corto) y firma convenios con la Junta para que las instalaciones deportivas de institutos y colegios abran sus puertas los fines de semana, que no haya chavales jugándose la vida al saltar una valla alta por ejercer un derecho a ejercitarse sin tener que retratarse. Si se rompe una pierna o la cabeza, las maris y los viejos de turno (que en su vida han practicado deporte) dirán: "Claro, es que era un cafre". No, señores míos, es que TENEMOS QUE CAMBIAR EL CHIP Y DARLE A LA GENTE BUENA BUENAS COSAS, QUE NO CUESTA NINGÚN TRABAJO DESTINAR UNA PARTIDA PRESUPUESTARIA AL MANTENIMIENTO DE LAS CANCHAS Y A SU PUESTA EN FUNCIONAMIENTO (PERO DE VERDAD) EN LUGAR DE GASTARSE EL ERARIO PÚBLICO EN FUENTES Y AUTOBÚS GRATIS PARA LOS TROPECIENTOS ANCIANOS.


La tercera edad suele tener 80 céntimos diarios para montarse en el autobús urbano. Sin embargo, aunque uno pague 30 euros al mes por hacerse socio de un polideportivo, eso no garantiza nada. Como siempre hay niñatos y burracos jugando al futbito, pues a los del baloncesto que les den. Y del domingo te olvidas, of course.


¿Se han percatado de que no hay ningún onubense entre los 12 campeones del mundo? Pero sí que hay dos malagueños, un cordobés y un extremeño. Y es que hay otro modo de hacer las cosas, caray. Tampoco hace falta irse a Barcelona, Madrid o País Vasco. Sólo hay que darse una vuelta por los barrios de Málaga, Córdoba o Badajoz para probar el sabor de la buena gestión y de la salubridad que da ver a cientos de chavales haciendo deporte en la calle. Otro mundo baloncestístico es posible, amigos.

1 comentario:

Unknown dijo...

ante la incompetencia...

INSURRECCION

Si las canchas están quemadas, quemémosle el coche a Rodri, aunque no serviría de nada se pagaría otro de nuestros bolsillos, pero eso si la gente lo seguirá votando. Esto es Huelva y aquí hay que "mamá"